Todas las versiones de la “dificultad respiratoria”
Sinusitis, rinitis, faringitis, laringitis y otitis: cinco términos distintos para aludir a una inflamación en las vías respiratorias. ¿Cómo remediarlas? Del baño turco nasal al tratamiento con antibióticos, te presentamos las distintas posibilidades para aliviar estas inflamaciones comúnmente asociadas al invierno. No obstante, si tienes infección deberás acudir al médico obligatoriamente.
Baño turco nasal para combatir la sinusitis
¿Tienes sinusitis? Los síntomas de esta patología son dificultad respiratoria y dolor de cabeza. En efecto, la sinusitis es una inflamación de las mucosas que altera el funcionamiento normal del tracto respiratorio superior. Si tu médico te confirma el diagnóstico, lo primero que debes hacer es decir adiós al tabaco y realizar inhalaciones un par de veces al día: un baño de vapor con agua salada caliente que podrás prepararte con un simple cuenco y una toalla. Ya solo tienes que respirar los vapores de la infusión caliente por la nariz y por la boca.
La ducha nasal, eficaz contra la rinitis
Si tienes rinitis, notarás la nariz “seca” y tendrás dificultad para tragar. No te preocupes: son los síntomas clásicos de esta inflamación de las vías respiratorias. ¿Cómo puedes aliviarla? Fácil, te recomendamos una ducha nasal micronizada, un instrumento que se conecta al aerosol de pistón y que te ayuda a lavar en profundidad la cavidad nasal y a evacuar las secreciones. Además de garantizarte una higiene total, la ducha nasal elimina el polen, el principal culpable de la rinitis alérgica.
Una solución natural para la inflamación de garganta
La faringitis, como la propia palabra indica, es la inflamación de la faringe. La gente de a pie la llamamos “dolor de garganta” y puede ser crónica o aguda. En este último caso deberás preguntar a tu médico qué fármacos consumir. Si por el contrario es una forma ligera o estacional de dolor de garganta, puedes elegir algunos productos naturales como los propóleos o el eucalipto, que desinfectan toda la cavidad oral.
Contra la laringitis, descongestivos o antibióticos
¿Tu tono de voz ha caído hasta el fondo del pentagrama? Si eres un fumador empedernido, no te extrañes: la laringitis, inflamación de las vías respiratorias que afecta a las cuerdas vocales, forma parte del lote. Recuerda que los principales síntomas de la laringitis son ronquera, tos seca, dolor agudo en la garganta y, a veces, fiebre. En este caso deberás acudir al médico, quien probablemente te prescribirá fármacos descongestivos para aliviar los síntomas de sequedad provocados por la inflamación. ¿Y si tienes infección? Tu médico te prescribirá el tratamiento con antibióticos más adecuado a tu caso.
Paños calientes para la inflamación del oído
¿Tienes la oreja de color granate o no oyes bien? Podrías sufrir otitis, una inflamación del oído. Si la padece tu pequeño, la reconocerás rápidamente porque llorará inconsolable y sacudirá la cabeza a menudo. En estos casos, tanto para ti que eres adulto como para tu hijo, lo mejor será dormir con la cabeza elevada para reducir la hinchazón y apoyar un paño caliente sobre la oreja. Solo si te lo aconseja el médico y siempre que no perfores el tímpano, podrás recurrir a gotas analgésicas y antiiinflamatorias o, si existe infección, a antibióticos.