¿Tu compañera te dice que roncas cuando duermes boca arriba? Prueba a cambiar de posición. Es una solución bastante sencilla: al dormir de lado la garganta se abre y probablemente roncarás menos.
Si de veras tienes intención de dejar de roncar, prueba a dormir con dos almohadas debajo de la cabeza en vez de una. Un apoyo más alto que sostenga cuello y garganta mantendrá abiertas y libres las vías respiratorias. Es importante que coloques las almohadas de manera que tu espalda se sitúe en una posición cómoda, ¡no querrás levantarte con dolor de espalda y de cuello al día siguiente!
Si roncas porque estás resfriado, antes de ir a dormir puedes hacer inhalaciones con agua y bicarbonato o aceites esenciales. Te ayudarán a liberar las vías respiratorias y a dejar dormir a tu compañero/a.
¿Sabías que tus ronquidos pueden estar causados por la ansiedad o el estrés? Si estás en un periodo especialmente intenso, lo que debes hacer es intentar relajarte poco antes de acostarte. Piensa en algo que te guste, que te infunda tranquilidad y haz algunos ejercicios de respiración breves.
¿Quieres un buen consejo? Si realmente quieres dejar de roncar y te importa tu salud y tu relación de pareja, deja ya de fumar. Debes saber que el tabaco, además de dañar tu salud, obstruye las cavidades nasales, haciendo que ronques sin parar.
Un último remedio casero: toma una ducha caliente antes de ir a dormir y roncarás menos. El vapor liberado por el agua caliente contribuirá a abrir tus cavidades nasales, por no hablar del efecto relajante de una ducha caliente.